La Luna es el refugio emocional de cada niño. Es ese espacio íntimo donde encuentran seguridad, ternura y la forma en que procesan sus emociones más profundas.

En astrología, la Luna natal representa las necesidades emocionales básicas y la manera en que cada ser humano se siente en calma.

En la infancia, comprender la Luna de un niño puede ser una herramienta poderosa para las madres y padres. No se trata de encasillar, sino de acompañar con mayor sensibilidad y conciencia.

Por ejemplo:
- 🌟 Luna en Fuego (Aries, Leo, Sagitario): Niños que necesitan aventura, movimiento y expresión.
- 🌊 Luna en Agua (Cáncer, Escorpio, Piscis): Almas sensibles que requieren contención y escucha.
- 🌬️ Luna en Aire (Géminis, Libra, Acuario): Niños curiosos, que buscan comunicación y juego social.
- 🌱 Luna en Tierra (Tauro, Virgo, Capricornio): Necesitan rutinas, calma y seguridad material.

Por supuesto, este ejemplo solo representa una gota dentro de lo que constituye una mar inmenso como es la psicoastrología y toda la información de valor que nos aporta.

Tenemos la costumbre de solo fijarnos el su signo solar, cuando la carta natal nos dice que observar la Luna de tu hij@ es un recordatorio de que cada niñ@ es único, con su propio lenguaje emocional. Y acompañarlos desde ahí es un regalo que marcará su vida.

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